Los residentes argentinos y uruguayos que necesitan cruzar a Salto y Concordia respectivamente por cuestiones familiares o laborales instalaron una carpa de protesta frente al consulado argentino en la ciudad vecina y se instalaron en la plaza 25 de Mayo a modo de protesta por la no apertura de la frontera al Uruguay el 1° de octubre tal como se había previsto a principios de esta semana. Darío Alasina, integrante del Grupo Puente, indicó que siguen sin poder cruzar por Salto Grande porque no está habilitado como “paso seguro”. “Seguimos en ascuas y en las declaraciones de (directora de Migraciones, Florencia) Carignano se dice que en el transcurso de los días se van a ir abriendo pasos seguros pero, en concreto, para nosotros sigue todo igual”, remarcó. “Empezamos a hacer la vigilia desde ayer y no vamos a levantar hasta que no tengamos una respuesta”, remarcó.
Alasina dijo que pidieron tener acceso al supuesto protocolo que se necesita para abrir un paso seguro y no se necesita un modulo sanitario como el que se está construyendo en Salto Grande. “Una posta sanitaria la podés tener en una carpa. Y en Salto Grande tenes sobrada capacidad para que eso funcione. Y lo del módulo sanitario eso estaba previsto de hace rato porque llegó un préstamo del BID (Banco Interamericano de Desarrollo) para construir eso que era un modulo sanitario independientemente de lo del Covid. Y que lo utilicen para hacer un hisopado bueno justo calza y mejor todavía”, indicó.
“Pero tampoco necesitas gran cosas para hacer un hisopado. Ni siquiera necesitas un bioquímico. Con un técnico de laboratorio que te haga el hisopado con antígeno o con una tira reactiva. O si es un PCR se lo llevan a la ciudad como hacen acá cuando cruzan. Cuando cruzás el puente hay un laboratorio que puso un técnico que te hisopa y te avisa como te dio el resultado. Mientras tanto tenés que hacer cuarentena”, dijo a su vez Alasina.
Por otra parte, indicó que quien vaya de visita a Salto debe volver a Colonia en autobús, curzar en un barco atestado de gente a Buenos Aires, ir del puerto de Buenos Aires hasta Retiro para tomar un micro a Concordia. “¿Eso es seguro? ¿No es más seguro que me lleve un familiar hasta el puente, me haga lo que tenga que hacerme y después yo pueda cruzar a Concordia?. Hay cierta incoherencia que se maneja desde Nación o de Provincia que no se puede sostener. Ese es el enojo nuestro”, indicó.
El enojo no solo está enfocado puntualmente en la Nación sino también en el gobierno entrerriano. Alasina recordó que la Nación el 6 de septiembre les pasó la potestad a los gobiernos provinciales para que aquellas provincias que tengan frontera con países limítrofes puedan establecer su propio protocolo y los requisitos para cruzar. “Entre Ríos esperó hasta el 6 para sentarse a ver qué protocolo hacían. Y luego decidieron innovar porque dijeron que lo que proponía Nación no querían hacerlo; querían una especie de ciudad burbuja entre Concordia y Salto. Lo complicaron más porque para hacer una burbuja entre dos países tenés que ponerte de acuerdo entre los dos países y esto se va estirando hasta quien sabe cuando hasta que se pongan de acuerdo. Pero hay diferencias políticas porque se sabe que de aquel lado está la derecha y de este lado está el peronismo. Hay un montón de cuestiones en que no se van a poner de acuerdo”, remarcó.
Al mismo tiempo, Alasina sostuvo que es mentira que lo que se señaló desde la intendencia de Concordia: que habían puesto a consideración de las autoridades uruguayas del protocolo. “Eso es mentira. Hoy hablamos con (Canciller de la Republica de Uruguay, Francisco) Bustillo, con el intendente (de Salto, Andrés) Lima. Y de ninguna manera el gobierno de Entre Ríos le pasó a Uruguay un protocolo para que se considere una burbuja. Nos están mintiendo en la cara y eso un poco molesta”, dijo.
Diario Junio