El empresario Hugo Tarditi asegura que el actual valor del dólar no sirve a los exportadores. Sobre nuevos mercados para el citrus, como Brasil, Japón o China, dice que “lo real” es que “las ventas no se concretaron”.
Si bien es cierto que se realizaron importantes anuncios, como las exportaciones de mandarinas a Brasil o EEUU, el interés de Japón o China en la fruta de la región, lo real es que a pesar de lo dicho por las autoridades las ventas no se concretaron aún, sostuvo el empresario. También calificó como incierto el programa de reconversión citrícola que se anuncia y no se pretende decir con esto que no sea necesaria, pero hay muchos puntos confusos sobre el programa.
Estos temas son de particular importancia para esta economía regional que, no hay que olvidar, en la provincia de Entre Ríos tiene su mayor foco productivo en el departamento Federación, donde mueve mucho dinero y da un número importante de mano de obra directa e indirectamente.
“Hace casi un año que el ministro de Producción de la provincia, Roberto Schunk, planteó el tema de la reconversión productiva para la citricultura, y hay en nuestra región muchos productores importantes, jóvenes, que apuestan al mercado interno los 365 días del año y algún porcentaje menor a la exportación. Yo me pregunto, hablan de reconversión, pero para eso se necesitará dinero. ¿Quién toma un crédito hoy?, ¿a qué tasas?, no es tan sencillo este tema como se lo plantea”, dijo Tarditi.
El empresario recordó que “para que una planta sea productiva necesitamos al menos ocho años, mientras tanto hay que mantener esa planta, curarla, abonarla, y todo el trabajo que el citrus requiere. Eso también cuesta dinero”.
“Pero además hay que ver las variedades. Hay muchas variedades. Desde la Cámara de Exportadores estamos por traer yemas de mandarinas, pero es difícil aconsejar a un productor sobre las variedades si no sabemos si dentro de ocho años el mercado preferirá esa variedad u otra y además, ¿cuáles serán los mercados importantes para nuestra citricultura dentro de ocho o diez años? Por eso digo que hay cosas que no están muy claras en este tema y hay que tomarlo con mucha precaución”, dijo.
En este marco agregó: “Yo, personalmente, a la reconversión productiva la veo muy complicada de la manera que se la plantea. Repito que algún empresario joven, que tenga resto económico, puede interesarse y le puede resultar beneficioso el programa, pero recordemos que España, Marruecos, Sudáfrica nos llevan gran ventaja en los estudios de este tema, por lo que llegaron a desarrollar variedades apetecibles que nosotros no tenemos”.
Tarditi dijo asimismo que “nos dicen que vamos a exportar a Japón, pero ¿quién exporta citrus a Japón desde Argentina?… ¡Nadie!. Son alrededor de 50 días de viaje, de manera que es muy peligroso para la fruta y costoso, a riesgo de perder lo que se envía y con ello el dinero, porque si la fruta no llega en óptimas condiciones la rechazan, no es que se la venda más barata, la rechazan y hay que tirarla”.
Consideró que hay mercados muy importantes como EEUU, pero “no le podemos vender a pesar de lo que se ha dicho. Uruguay le vende citrus, pero nosotros no. Creo que hay aquí un mal manejo político, a lo que hay que agregar que a nosotros no nos ven bien en el mundo, así que no vendemos a EEUU y es el mercado más importante y que mejor paga. Por ejemplo, la variedad Clementina se vende a 11 euros en Europa con todos los gastos que tenemos para poner la fruta allá, pero en EEUU, esa misma variedad se paga 35 dólares. Se hacen reuniones y anuncios pero nosotros no podemos vender a EEUU, mientras Uruguay, con fruta similar, le vende”.
En otro orden, Tarditi recordó que “somos en el país 40 millones de habitantes, estamos preocupados por la situación económica, por la inflación, y quien consume mayor cantidad de cítricos es la gente de menores recursos. Con las cosas como están, lo primero que se deja de lado es el postre. Por supuesto que hay citricultores a los que las cosas pueden irle bien en el mercado interno, pero la mayoría muestra preocupación lógica”.
“Siempre esperamos que lo viene será mejor, pero el futuro es algo endeble”, destacó.
También se refirió a China. “Es un mercado apetecible, porque si bien ellos son grandes productores de cítricos, son tantos habitantes que tienen que importar. Pero recuerdo que cuando creamos FAMA SA hicimos negocio con China, pero abandonamos porque era muy delicado. Venderles mandarinas es más que difícil y llegar bien con las naranjas es muy complicado y riesgoso, así que nos vimos obligados a dejar la venta”, explicó.
“Puede ser una alternativa salir por puertos chilenos, inclusive se está hablando de venderle fruta a este país, pero hay que recordar que Chile tiene fruta mejor que la nuestra, sobre todo en Clementina. Desarrollaron un trabajo muy importante”, informó.
También se refirió a Brasil. “Ellos cuidan su mercado. Nosotros no podemos exportarle a Brasil porque ellos imponen frenos y cuidan sus productores. Nosotros tenemos mucho mejor fruta en todo sentido, así que podrían ser clientes nuestros, pero no se concretan ventas”, apuntó.
Finalmente se refirió a la necesidad de que los dirigentes políticos tomen medidas de defensa para las economías regionales del país. “Hace años que se repiten los problemas pero las soluciones no aparecen para las economías regionales del país. Como decía antes, hay momentos en que hay productores que logran utilidades importantes, pero necesitamos políticas para la producción en general; no es solución que algunos hagan diferencia. Por otra parte, el dólar no sirve para exportar ya que todos los insumos están dolarizados, lo que no se exporta va a mercado interno y eso hace que el precio caiga. Además hay variedades de exportación que no se consumen en el mercado interno y como si esto fuera poco hay muchos países que desde hace algunos años exportan citrus, de manera que la competencia es importante”, acotó finalmente.
Fuente: Y ahora qué pasa??? / Chajarí al Día