Luego de una madrugada signada por la caída de granizo, la Asociación de Productores de Arándanos de la Mesopotamia Argentina (APAMA), emitió un primer diagnóstico sobre los daños sufridos en la producción regional.
“En la zona de Magnasco cayó muy poquito por lo que el daño fue mínimo”, comenzó señalando Omar Chiarello.
Por otro lado, el presidente de APAMA señaló que “en la zona de Colonia Roca cayó la mayor cantidad de granizo y el daño fue mayor”, sobre todo en dos establecimientos, afortunadamente «en uno de ellos había malla antigranizo”.
“Aún se está evaluando pero como sigue el mal tiempo no se puede recorrer”, detalló el dirigente.
Lo que viene
Consultado acerca de las acciones inmediatas luego de las inclemencias climáticas, Chiarello puntualizó que “lo primero que hay que hacer es esperar que pase el mal tiempo, y evaluar el daño sobre la fruta. Luego limpiar todo el campo, la fruta madura que está afectada mandarla a industria y seguir para adelante”.
Por último, el productor evaluó que “por suerte no ha sido de la magnitud de otras veces, fue afectada la producción pero muy mínimo”, evaluó.
