La empresa Garbarino comenzó a enviar telegramas de despido a 1.800 trabajadores y el Ministerio de Trabajo decidió dictar la conciliación obligatoria para retrotraer la situación. Asimismo, la cartera laboral convocó para el próximo el miércoles 17 de noviembre una reunión con la empresa y la Federación Argentina de Empleados de Comercio y Servicios (FAECYS).
“Destacamos que es procedente que cada trabajador rechace la carta documento de despido por ser la causal invocada por falaz, atento que el empleado es ajeno al riesgo empresario, asimismo la situación de la empresa no fue llevada de una forma diligente, sino que su situación se agravó aún más con la entrada del nuevo grupo empresario y se violó además lo dispuesto en el Decreto 329/2020 prorrogado por DNU 413/2021 de no despidos y mantener las fuentes de trabajo, intimando además a mantener vigente la relación laboral y seguir por lo tanto devengando salarios y reservar derechos”, se señala en una carta firmada, entre otros, por Armando Cavalieri, titular del Sindicato de Empleados de Comercio a nivel nacional. En Concordia, la sucursal de la firma donde trabajaban cinco empleados, ubicada en calle Entre Ríos, no abre desde hace varias semanas y el local estaría vacío de mercadería.
Al conocerse el envío de los telegramas, FACEYS había pedido a la cartera laboral “disponer las medidas pertinentes para promover una solución pacífica y legal al conflicto planteado, en el marco de la competencia de esta Autoridad”.
La decisión del actual dueño de la conocida cadena, Carlos Rosales sería cerrar todos los locales, quedarse con una docena de tiendas de Compumundo y menos de 1.000 trabajadores.
En su resolución, el Ministerio de Trabajo le pidió a FACEYS descartar «toda medida de acción directa que estuviesen implementando y/o tuvieran previsto implementar».
En cuanto a Garbarino, solicitó que “en caso de haber efectuado los despidos denunciados, retrotraer la situación a la existente con anterioridad al inicio del conflicto, dejando sin efecto los despidos producidos por el plazo que dure el presente procedimiento conciliatorio, otorgando tareas en forma normal y habitual a todo su personal, como así también abstenerse de tomar represalias de cualquier tipo con el personal representado por las organizaciones sindicales y/o con cualquier otra persona.
Garbarino viene atravesando una crisis financiera con una acumulación de deudas que superarían los $ 4.600 millones.
Diario Junio
