Esto genera «un inmenso malestar» entre los trabajadores. En agosto y septiembre ya se había registrado atrasos importantes en el pago de los sueldos. Advierten sobre la grave situación financiera que atraviesa una comuna entrerriana.
Omarini confirmó que ya en agosto y septiembre, el intendente Edelmiro «Piri» Krämer tuvo atrasos importantes para abonar los salarios de los trabajadores de la municipalidad de Ramírez, y señaló que en lo que va de noviembre, todavía no pagó los sueldos de octubre. «Hay un problema serio porque la municipalidad de Ramírez no puede, con los recursos que administra, pagar los salarios, lo que es una cuestión elemental».
Ante esta situación, el Sindicato de Empleados Municipales de General Ramírez realizó el viernes medidas de fuerza que incluyeron asambleas y retención de servicios en los lugares de trabajo.
Aunque aclaró que no habla de un vaciamiento de la municipalidad, Omarini advirtió sobre la falta de eficiencia de la actual gestión. «Es una situación que se viene dando desde hace dos meses atrás, y que debe solucionarse a la brevedad».
Teléfono para Krämer
El concejal señaló que en reiteradas oportunidades solicitaron a Krämer que autorice a los secretarios del gabinete para que reciban a la Alianza Ramirense, para organizar la transición de gobierno, pero dijo hasta el momento el jefe comunal no permitió que esos encuentros se concreten.
Recién ahora, Krämer contestó por nota que los atenderá el 24 de noviembre, 15 días antes de la asunción de los nuevos funcionarios. «Es una situación irregular y preocupante y si bien por estilo propio no queremos alarmar a la población, porque el 10 de diciembre nos haremos cargo de lo que nos compete y las cosas irán mucho mejor, queremos pedir seriedad a las actuales autoridades, ya que deben gobernar hasta el día en que nosotros asumamos».
Omarini reclamó a Krämer y a sus funcionarios que tengan presente que serán recordados por la ciudadanía no solo por lo que hicieron durante su gestión de gobierno, sino por el último tiempo de mandato. «El legado que uno deja está fuertemente marcado por los últimos meses de la gestión. No queremos confrontar, pero les pedimos seriedad y responsabilidad para que los empleados municipales cobren a término».