La mujer que denunció al intendente de La Criolla habló con medios de la ciudad de Concordia sobre el tema.
Según se pudo leer en el sitio Diario Río Uruguay, y ver a través de la pantalla de canal 2, Liliana Ardai, (Ardaiz apellido correcto) de 57 años, es una trabajadora provincial que -amparada por la conducción local de UPCN- denunció este martes al intendente de La Criolla, Nicolás Passarello, acusándolo de agresiones verbales en su lugar de trabajo. Passarello emitió un comunicado donde plantea otra visión de lo sucedido.
La versión de la señora
Una trabajadora del asilo de ancianos de la Criolla acusó a Passarello de haberla insultado en su lugar de trabajo. La delegación local de UPCN llevó el caso a la Dirección de Trabajo.
En declaraciones a Diario Río Uruguay, Ardai explicó que el pasado lunes (alrededor de las 10:20 de la mañana) se encontraba cocinando como habitualmente lo hace , cuando observó que llega al lugar el intendente Passarello acompañado del viceintendente.
Seguidamente, siempre de acuerdo al relato de Ardai, describió que “lo noté un poco nervioso” al jefe comunal, haciendo hincapié en que “daba vueltas por el lugar, miraba las despensas, el patio, se dirigió a la pileta, estaba nervioso e incluso dobló unos fierros que estaban afuera”, detalló.
Luego, relató que el jefe comunal le dice “¿Está todo bien acá?”, a lo que Ardai cuenta que respondió “que sí, está todo correcto”. A lo que Passarello le habría respondido: “¿Estás segura de que está todo bien?” “Y sí, le digo yo” cuenta Ardai.
Tras lo cual Passarello habría estallado para reprocharle: “¿Vos decís que está todo bien? ¿Qué te crees, que hablaste con el gobernador y con el vicegobernador y me querés pasar por encima?” Y continuó – según Ardai- diciendo que “yo soy el intendente del pueblo, yo mando, pongo y saco a quien quiera acá”.
En este escenario, la trabajadora explicó que estas agresiones verbales son “por un problema que no tiene nada que ver con mi trabajo”, haciendo referencia a que el intendente se había enterado de que a su hija le ofrecieron trabajar como ordenanza en la escuela secundaria de la localidad y “de ahí se enojó y se la agarro conmigo”, argumentó la mujer.
Tras el episodio, la denunciante expresó que “se me vino el mundo abajo, me sentía re mal”, rayendo a colación que hace 5 años trabaja en esa dependencia municipal, lugar al que el intendente “me fue a faltar el respeto y yo jamás hice eso con él”.
La versión de Passarello
A raíz de la situación generada en las últimas horas, en la cual una empleada provincial denunció maltrato y agresión verbal, el Intendente hizo público un comunicado explicando lo sucedido.
Passarello manifestó que ¨concurrí al Hogar de Ancianos que es provincial, pero que depende del municipio para ver cómo se estaba trabajando y cómo se estaba llevando adelante los distintos menues para los abuelos. En ese momento una de las cocineras me realiza un reclamo laboral a mí, cuando ellas es empleada de la provincial, no del municipio. Yo en ese momento le manifesté que se dirija a quien corresponda. Aparentemente eso no le habría gustado y de ahí el enojo de esta señora.¨
Passarello dijo por su parte que ¨nunca la maltraté ni le falté el respeto, sí es mi deber controlar qué y cómo se cocina a nuestros abuelos¨
Consultado por lo publicado por otro medio de comunicación, el Intendente dijo ¨en la noche de este martes me llamaron de distintos lados por este tema, y yo le pedí a una de las cronistas que me llamó que aguante un ratito que estaba ocupado, y ella insistió en decir que yo corté el teléfono. Lamento si malinterpretó lo sucedido, pero es lo que ocurrió¨ finalizó Passarello
