«Recorriendo Nuestras Instituciones» pone la lupa en la Cooperativa Apícola Villa Elisa. «Desde que nos juntamos, los apicultores pudimos vender la miel que teníamos y de ahí no paramos», cuenta su actual presidente, Luis María Villón.
Una de las entidades que representa la producción agropecuaria y nuclea a los miembros de un mismo sector es la Cooperativa Apícola Villa Elisa Limitada, a través de las oportunidades y servicios que brinda en forma sostenida desde hace casi dos décadas a los apicultores de la zona.
«La Cooperativa Apícola es una institución que trabaja en la defensa y el bienestar de los productores apícolas de esta zona: Villa Elisa, Hoker, Colonia San Miguel, San José, Colón y hasta Pronunciamiento. Si bien desde la Asociación para el Desarrollo de Villa Elisa y Zona convocaron para conformarla en la década de 1990, recién nos constituimos realmente por la crisis de los nitrofuranos en la miel (residuos de antibióticos) que tuvimos ya en el nuevo milenio», presenta el presidente de la comisión directiva, Luis María «Cholo» Villón.
La doctrina y la esencia del cooperativismo «es algo muy bueno en todo el mundo, probablemente lo mejor que haya entre los sistemas de las organizaciones. Desde que nos juntamos, los apicultores pudimos vender la miel que teníamos y de ahí no paramos, porque las ambiciones y las ganas de crecer eran muy importantes. Actualmente somos alrededor de 35 los socios activos. La idea es siempre cubrir los costos y que quede algún excedente para el manejo de la Cooperativa».
Sobre los lazos institucionales, indica que «formamos parte de la Federación de Cooperativas y Entidades Apícolas de Entre Ríos (Fecaer), que a su vez integra la Cámara de Comercio y de la Pequeña y Mediana Empresa, de manera que Villa Elisa también está representada a nivel nacional. A todo evento o jornada que se lleve a cabo tratamos de concurrir, como pudimos asistir en alguna oportunidad a la Ciel de París (Francia), un congreso mundial en Ucrania y hace dos años en Corea del Sur, aparte de las fiestas provinciales y nacionales. Este año tenemos pensado viajar a Estambul (Turquía) a un congreso».
En cuanto a los proyectos, «desde el año pasado venimos trabajando con el Inti (Instituto Nacional de Tecnología Industrial) en una planta recuperadora de cera, que conseguimos que el gobierno nos ayude a través un plan nacional pero por el momento está un poco paralizado, ya que no llegó todavía el dinero para la construcción».
Respecto la situación del sector apícola, cuenta que «se vienen logrando exportaciones directamente desde Villa Elisa, aunque hoy está un poco más complicado el tema por las nuevas exigencias de Senasa, que vamos adaptándonos de a poco. La producción de miel fue bastante buena este año porque se obtuvieron unas 700 toneladas de miel de eucaliptus y unas 250 de pradera, así que los productores estamos conformes y tratando de progresar de una forma u otra, sumando nuevas colmenas o renovando el parque automotor. No siempre es fácil el mercado de la miel, porque depende de la realidad de otros países del mundo».
Quienes necesiten ponerse en contacto con sus integrantes, la sede administrativa de la Cooperativa Apícola tiene lugar en la Asociación para el Desarrollo y está a cargo de Darío Travichet, en calle Héctor de Elía 1247, llamando al 480636, a través de info@apicolavillaelisa.com.ar o ingresando a www.apicolavillaelisa.com.ar.
«Argentina exporta el 95% de la miel que produce»
«Cholo» Villón lamenta que la miel no se consuma más en el país. «No hay cultura del consumo de miel, aunque hay que tener en claro que la miel es un alimento y no un remedio, que se debería consumir todo el año y no solo acordarnos cuando tenemos gripe en el invierno o nos duele la garganta», dice.
En el plano internacional, «hay países que deben importar la miel, porque consumen muchísimo y no les alcanza. En Argentina, el promedio per cápita es de 200 gramos por persona en un año, que es nada si lo comparamos con otros países que consumen hasta 8 kilos en un año, siendo que el costo de la miel argentina en un supermercado europeo puede ser de hasta 7 euros el kilo».
Igualmente, el presidente de la Cooperativa Apícola sostiene que «siempre se está tratando de incentivar el consumo con la Semana de la Miel y la Campaña «Sumale miel a tu vida» o incluyendo la miel en los comedores escolares, pero tampoco podemos manejarles el presupuesto o lo que quieren comprar».
Al momento de elegir algún producto endulzante, «terminamos siempre cayendo en algunas mermeladas o dulces, que son los que primero aparecen en las góndolas de los supermercados, que no los vamos a poder comparar nunca con la calidad y el poder energético de la miel, porque es algo natural y no industrializado».
