Con los nuevos precios de los combustibles se viene otra ola de aumentos generalizados

precios-1Según estimaciones del propio ministro de Energía, Juan José Aranguren, entre 47% y 48% del precio de las naftas es una suma de impuestos nacionales, ingresos brutos provinciales y tasas municipales, mientras que en gasoil la carga tributaria es del 42%. Por lo tanto, cada vez que aumenta el precio de los combustibles también ocurre un ‘impuestazo’, tal como sucede con los ajustes de tarifas, que también tienen una carga impositiva tan inexplicable como la que grava al salario: la estructura tributaria argentina es tan grotesca como el gasto público que financia.

Es importante considerar que con el nuevo ajuste de los combustibles, en las próximas horas habrá nuevas remarcaciones en los productos de venta masiva.

Con la nafta arriba de $17, ¿de qué Precios Cuidados hablamos?
Alejandro Bianchi, quien hoy día es vocero del ministro Juan José Aranguren escribió hace 2 años, cuando trabajaba en el canal TN (Grupo Clarín):

“(…) En concepto de impuestos (impuesto a la transferencia de combustibles (ITC); IVA; la tasa hídrica, impuesto a débitos y créditos bancarios; Ingresos Brutos) el Estado nacional se queda con el 50% del precio minorista del litro de nafta. Además, algunos municipios como Vicente López, San Isidro o la provincia de Córdoba cobran una “tasa vial” que oscila entre 30 y 75 centavos por litro para obras en rutas y caminos. Una baja en el valor de la nafta implicaría menos recaudación en un momento en el que el déficit fiscal es cada vez más preocupante.
Las provincias petroleras son los otros interesados en sostener el precio argentino de las naftas. El valor local del barril es la variable que fija el monto que cobran de regalías. De bajarse, sus cuentas públicas, ya en rojo, entrarían en zona de riesgo. Hoy se reúnen en Buenos Aires los gobernadores petroleros para dejar en claro que no quieren que nada cambie. (…)

Por último, la YPF reestatizada es el último eslabón de esta cadena de precios distorsionada. La empresa necesita mantener su facturación en alza para seguir invirtiendo en Vaca Muerta y otros pozos convencionales y así recuperar lo antes posible el autoabastecimiento energético. Una baja de precios en los surtidores sería menos recaudación y también un problema político para el gobierno tras la expropiación a Repsol. La inflación, en paralelo, sube los costos locales para la empresa. (…)”.

Es difícil no recordar aquella buena descripción en los estertores de la Era K, válida en la Administración Macri.

En esta ocasión, rige una suba del 10%: la nafta súper de YPF en la ciudad de Buenos Aires, la más barata del país, subió $ 1,53 por litro y superó los $ 17.

El resto de las petroleras también aumentó sus precios: Axion, Shell, Oil y Petrobras.

Esto provocará en horas más una nueva remarcación de precios por el incremento de costos que supone para distribuidores, comercializadores e inclusive algunos industriales, además de alentar la especulación de otros.

El ex gobernador José Manuel de la Sota manifestó en la ciudad de Córdoba que el presidente de Mauricio Macri “hasta ahora no ha mostrado un plan pasa salir de la inflación y devolverle la tranquilidad al país. Los trabajadores están sufriendo una inflación que se devora los sueldos, temen perder su trabajo o ya han caído debajo de la línea de la pobreza”.

En un acto por el Día del Trabajo, junto al gobernador Juan Schiaretti, consideró que “Macri no debería seguir gobernando en soledad. No tiene mayoría parlamentaria y hasta ahora no ha mostrado un plan para salir de la inflación”, y planteó la necesidad de “un acuerdo económico y social, para compartir equitativamente los esfuerzos y sacrificios para lograr la estabilidad económica, cuidar y crear nuevos empleos, y mejorar los salarios”.

De la Sota cuestionó a Macri por no considerar medidas de emergencias para evitar la “feroz remarcación de precios” que viene de la gestión anterior, y porque solamente “se han dado beneficios extraordinarios a las empresas más concentradas como las mineras y petroleras”.

Es el 4to. aumento del año de las naftas.

En diciembre 2015, la nafta súper de YPF costaba $ 13,01 el litro: el combustible acumula una suba del 30%.

Llenar un tanque de 48 litros con nafta súper costaba $624 promedio en diciembre de 2015, a partir de ahora saldrá más de $816.

Los precios de Shell: Shell fórmula súper, $17.48; Shell V. Power Nitro + Nafta, $19.98; Shell fórmula Diesel, $16.31; Shell V Power Nitro + diesel, $18.97.

El ajuste permanente en los surtidores es una secuela de la devaluación de diciembre que convalidó el gobierno de Mauricio Macri , cuando levantó el cepo cambiario: las refinadoras de combustibles pagan por el petróleo en la moneda local aunque atada al valor del dólar. Además, el precio del barril local de crudo está por encima del internacional por un acuerdo entre las empresas con el apadrinamiento del Gobierno para no frenar aún más la actividad petrolera en la Patagonia.

EL LITORAL

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